martes, 19 de octubre de 2010

El Ejército se queda solo


Por primera vez en la historia, el 16 de septiembre de 2008, con Felipe Calderón como presidente, la Secretaría de Marina abrió el desfile militar, como un evidente reconocimiento a los resultados logrados durante la administración.

Ese día se dejó en claro que uno de los grandes golpes de las autoridades federales contra el narcotráfico fue la incautación de 5.8 toneladas de cocaína de un semisumergible cerca de Oaxaca, acción efectuada por la Marina.

¿Y el Ejército Mexicano?

Por primera vez en la historia, el 16 de septiembre de 2010, en el desfile se incluyó, de manera inédita, inesperada, dándole un espacio preponderante para que participaran marchando, como una forma de gratificar su trabajo, a integrantes de la Policía Federal, corporación civil del gobierno del presidente Calderón.

¿Y el Ejército Mexicano?

Hoy un mandatario mexicano, por primera vez, envía una iniciativa de reforma al Senado de la República para que los militares sean juzgados por tribunales civiles, acción por la que hubo resistencia durante décadas.

Los mandos castrenses defendieron hasta donde pudieron la autonomía y permanencia de los tribunales de tipo militar, en los que han sido juzgados incluso generales vinculados con el narcotráfico, como Francisco Quirós Hermosillo y Arturo Acosta Chaparro.

¿Qué piensa el Ejército Mexicano?

Los grandes golpes contra el narcotráfico se han repartido entre las corporaciones y entre los más importantes se encuentran la capturas de Édgar Valdez Villarreal, "La Barbie", efectuada por la Policía Federal, y la muerte de Arturo Beltrán Leyva, en un operativo de la Secretaría de Marina-Armada de México... ¡¡en Cuernavaca!!, donde no hay costas.

¿Y el Ejército Mexicano?

El nuevo gran logro contra la delincuencia organizada fue el histórico decomiso de más de 105 toneladas de marihuana, justo el día de ayer, en Tijuana. La estrellita esta vez fue para la policía municipal de la localidad. ¿Y el Ejército Mexicano? Ah, pues llegó a apoyar a los agentes locales que hicieron el hallazgo y el aseguramiento.

El evidente poco apoyo gubernamental, la falta de un buen plan de difusión sobre lo que hace, las múltiples violaciones de soldados a los derechos humanos de civiles y quizá hasta la mala suerte son lastres que pesan, y mucho, sobre la Secretaría de la Defensa Nacional.

La pregunta hoy es: ¿A quién le interesará en este momento apoyar su trabajo?

(Foto: Los generales Arturo Acosta Chaparro y Francisco Quirós Hermosillo durante su juicio en un tribunal castrense del Campo Militar número 1)

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